miércoles, 4 de septiembre de 2019

Instagram no es la realidad.


Aunque ya he hablado un poco de las redes sociales con anterioridad, creo que resulta importante resaltar un punto, y es la falsa realidad que consumimos a través ella y sobretodo la “vida perfecta” que las personas que nos siguen perciben de nosotros y nosotros percibimos de los demas.

Me refiero ¿A quién no le gusta mostrarse feliz? Lo que más se postea en cuando tienes una sonrisa pintada en la cara, así como ese día que alcanzaste una meta, cuando comes algo rico o estas en medio de un relación que es hermosa o tal vez cuando estas de viaje por algún lugar que no has conocido antes y este es espectacular… y así podría pasar horas describiendo momentos que nos traen felicidad y queremos compartir con todos.

Pero ¿Y los momentos malos? Cuando estamos tristes, o enojados o simplemente la vida no está yendo de la manera que pensamos debería ir ¿Dónde quedan registrados esos momentos? Esos son los momentos que decidimos no compartir, es más hacemos todo lo necesario para eliminarlos y hacer como si nunca pasaron. ¿Dónde están los post de las largas horas de estudio o de trabajo? ¿O esas publicaciones de los días malos? Por lo general nunca están porque no mostramos la parte difícil de la vida.

La vida está llena de ambos, momentos de felicidad y momentos de dificultad, pero muchas veces nos dejamos llevar por lo que las otras personas nos muestran de su vida, cada vez que entro a Instagram entro a una irrealidad, lo llamo así porque son muy pocas las veces con las que me consigo con un post donde una persona cuente su realidad como tal, la mayoría –y me incluyo– mostramos solamente el lado bonito de nuestra vida, las cosas buenas que nos pasan cuando todo nos sale bien, los momentos de felicidad, nos gusta compartir cosas buenas.

Y esto no está mal, querer publicar solo lo bueno, pero eso hace que idealizamos la vida de personas que verdaderamente no conocemos a profundidad y que idealicen la nuestra, que creamos que cierta persona tiene una vida perfecta o que siempre lleva un estilo de vida, lo cierto es que no sabemos si es así, porque solamente vemos lo que esa persona quiere que veamos de su vida.

Lo cierto es que a veces te puedes sentir mal porque no estás viviendo una vida de Instagram donde todo es perfecto, pero no te aflijas ni idealices, todos tenemos nuestras propias luchas y nuestras desgracias solo que no todos la conocen, son muy pocas las personas que tienen un contenido orgánico, no preparado donde se muestren tal y como son. Tranquilo o tranquila, su vida no es perfecta y además tú también tienes una vida perfecta a la vista de tus seguidores, así que no te sientas mal.

“¿Por qué finge todo el mundo lo que no es importante lo es y mucho, y al mismo tiempo todos se afanan terriblemente en fingir que lo realmente importante no lo es en absoluto?” Jenne Teller, Nada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario